Una sorpresa hermosa

La plantación contenía un secreto; algo oculto. Para festejar sus 50 años de casados, Lee Wilson apartó 82 hectáreas de su tierra para producir el quizá más grandioso regalo floral para su esposa. En secreto, plantó semillas de girasol que, finalmente, brotaron hasta ser 1.2 millones de flores doradas, las favoritas de ella. Cuando las coronas amarillas se irguieron, Renee quedó atónita y maravillada con el hermoso acto de amor de Lee.

Enseñanza loca

Sophia Roberts tenía once años cuando presenció por primera vez una cirugía a corazón abierto. Aunque podría parecer que era muy pequeña para ver semejante procedimiento, hay que saber que su papá, el Dr. Harold Roberts, es cirujano cardiovascular. En 2022, Sophia (que ahora tiene 30 años y es médica cirujana residente) realizó con su papá un reemplazo de la válvula aórtica. Harold dijo: «¿Qué mejor? Le enseñé a esta niña a andar en bicicleta […]. Ahora, enseñarle a operar un corazón humano es bastante loco».

Vale la pena esperar

Phil Stringer esperó 18 horas para abordar un vuelo demorado. Pero su paciencia y perseverancia valieron la pena. ¡No solo llegó a su destino a tiempo para unas reuniones de negocio importantes, sino que fue también el único pasajero en el vuelo! Los asistentes de vuelo le dieron todo lo que deseaba comer, y Stringer agrega: «Por supuesto, me senté en la primera fila. ¿Por qué no, si tienes todo el avión para ti solo?». Sin duda, la espera valió la pena.

Adoración transformadora

Susy lloraba sentada afuera de la unidad de terapia intensiva; paralizada por el miedo. Los pulmones de su bebé de dos meses estaban llenos de líquido, y los doctores dijeron que harían todo lo posible para salvarlo, pero sin garantías. Dice que, en ese momento, «sintió el delicado impulso del Espíritu Santo que le recordaba adorar a Dios». Sin fuerza para cantar, reprodujo canciones de alabanza en su teléfono durante los tres días siguientes en el hospital. Mientras adoraba, encontró esperanza y paz. Hoy señala que la experiencia le enseñó que «la adoración no cambia a Dios, pero sí a la persona».

No darse por vencido en Cristo

En la obra clásica de J. R. Tolkien, La comunidad del anillo, cuando Gandalf confronta a Saruman, queda claro que este había abandonado lo que supuestamente debía hacer: ayudar a proteger Tierra Media del poder de Sauron, el ser maligno. Y no solo eso, ¡se había aliado con Sauron! Entonces, los examigos entablaron una batalla épica del bien contra el mal. ¡Si tan solo Saruman no se hubiese dado por vencido y hecho lo que sabía que era correcto!

El Dios del orden

César tomó todos los medicamentos que pudo encontrar en el gabinete. Criado en una familia rota y desordenada, su vida era un caos. Su padre solía abusar de su madre, hasta que se quitó la vida. Ahora. César quería «simplemente terminar» con la suya. Pero, de pronto, pensó: ¿Adónde iré cuando muera? Por la gracia de Dios, no murió ese día. Y más tarde, tras estudiar la Biblia con un amigo, recibió a Jesús como su Salvador. Parte de lo que lo llevó a Dios fue ver la belleza y el orden de la creación: Dijo: «Veo cosas que son simplemente hermosas. Alguien hizo todo esto».

El poder mayor de Dios

En marzo de 1945, el «Ejército Fantasma» ayudó a las tropas estadounidenses a cruzar el río Rin y darles así una base de operaciones vital en la Segunda Guerra Mundial. El equipo de 1.100 hombres simuló ser 30.000 al usar, entre otras cosas, tanques señuelos inflables, efectos de sonido de vehículos y explosiones por altoparlantes. Ese número pequeño de miembros hizo que el enemigo temiera a un supuesto ejército mucho más grande.

Dulce sueño

Recuerdos malos y acusadores inundaban la mente de Seba. El sueño lo eludía mientras el miedo llenaba su corazón y el sudor cubría su piel. Era la noche antes de su bautismo, y no podía detener la avalancha de pensamientos oscuros. Había recibido a Jesús como Salvador y sabía que sus pecados habían sido perdonados, pero la batalla espiritual continuaba. En ese momento, su esposa lo tomó de la mano y oró por él. Poco después, la paz desplazó su temor. Entonces, se levantó y escribió las palabras que diría antes de ser bautizado. Luego, pudo experimentar un dulce sueño.

Lugares extraños

Dios, ¿qué está pasando? ¿Este es tu plan para nosotros?

Muros derribados, unidad hallada

Desde 1961, familias y amigos estuvieron separados por el Muro de Berlín. Erigido ese año por el gobierno alemán oriental, la barrera evitaba que sus ciudadanos huyeran a Alemania occidental. El presidente estadounidense Ronald Reagan se paró sobre el muro en 1987 y declaró: «Derriben este muro». Sus palabras reflejaban una corriente de cambio que culminó con la demolición del muro en 1989, lo cual llevó a una gozosa reunificación de Alemania.